Suerte y talento, la fórmula del Milan
Los dos comenzaron su temporada en enero, después de las fiestas de fin de año. No es broma. Carlo Ancelotti y Rafael Benítez condicionaron la preparación atlética y mental de sus jugadores, renunciando a los torneos locales y concentrándose en Liga de Campeones y la cita de anoche en Atenas.
En el caso del Milan, porque comenzó la temporada con una deducción de puntos en la Serie A y su plantel es viejo, con un que sólo puede jugar una vez por semana. En el caso del Liverpool, porque su plantel es mediocre y no tiene un goleador nato.
El Milan también fue más afortunado que el Liverpool. Es mejor equipo, claro, pero la buena fortuna fue más importante en Atenas.
Primero, estuvo allí porque la justicia deportiva italiana se las arregló para facilitar en segunda instancia su presencia en Liga de Campeones, torneo que el fallo original había puesto fuera de su alcance por el
(Bueno, tal vez esto no sea buena suerte, sino el uso descarado del poder y las influencias para convertir en una farsa el curso de la justicia.)
La buena suerte también resultó decisiva en el momento más delicado del juego de anoche: cuando el Liverpool superaba claramente a su rival, aunque no podía encontrar el arco de Dida.
Allí apareció uno de los dos Inzaghi que jugaron anoche: el Inzaghi afortunado, que mete la pelota aunque no se lo proponga. Esta vez, desvió con su brazo izquierdo un tiro libre; con el brazo, pero en jugada legítima.
Después, claro, apareció el Inzaghi despiadado, expeditivo y cruel como un matarife. Y ya fue 2 a 0 y el fin del Liverpool, cuyo gol agónico no fue suficiente.
Allí estriba una de las razones del resultado: Milan tuvo adelante a un goleador, un delantero nato, mientras que el Liverpool no tuvo a nadie. Bueno, Kuyt es delantero, pero a este nivel sólo sirve para incomodar a los defensores, no para asustar al portero.
Tony Cascarino, un ex centrodelantero que hace análisis muy perceptivos desde la perspectiva de los jugadores, dijo antes del partido que Liverpool ganaría si jugaba con dos delanteros. El problema era a quién sacrificar: ¿Zenden, Pennant o Xabi Alonso?
Benítez se decidió por un término medio: hizo jugar a Gerrard más avanzado, casi como un centrodelantero, y ocupó las bandas con Pennant y Zenden. Pero Zenden apenas se vio y la ausencia de Crouch restó sentido y eficacia a los cruces desde las bandas.
Inzaghi estuvo apoyado por , el mejor jugador del mundo mientras Ronaldinho siga escondido. Esta sociedad estuvo en cortocircuito durante casi todo el partido, debido en buena parte a la intervención de . Cuando el argentino fue retirado, para dar paso a Crouch, á encontró a Inzaghi y allí se terminó el partido.
El juego de Mascherano suele desorientar a los comentaristas. No todos reconocen sus méritos, como ocurrió al principio de la carrera de Makelele en el Real Madrid.
, el excelente comentarista de El País de Madrid, nos dice hoy que “no encontró su sitio en la cancha y fue un mediocampista insustancial frente al despliegue de medios del Milan y a la laboriosidad de sus propios compañeros”. Vamos, que fue uno de los peores.
, en el Times de hoy, asegura que “nunca dio a á el tiempo y el espacio para tejer su magia, pero no fue dominante”. Vamos, que fue bueno, uno de los mejores.
, del Guardian, comenta que la decisión de retirar a Mascherano “dio a á el espacio que necesitaba y pudo lanzar a Inzaghi al segundo gol”.
Estas contradicciones se explican porque, como dice un comentarista de , el suyo es “un trabajo oscuro, efectivo”.
El comentarista de Sky en su transmisión en inglés lamentó la salida de Mascherano, diciendo que daba un mensaje alentador al Milan.
Ese es uno de los problemas de los jugadores del tipo de Mascherano: pueden deslomarse y frustrar mil cargas del adversario, pero la gente no le perdonará un solo error. Los jugadores como á, en cambio, sólo necesitan una jugada para purgar una camionada de errores o frustraciones.
Son formas diferentes de talento. Y todos sabemos cuál es la que nos gusta más.
ComentariosAñada su comentario
Asi es Mascherano era el hombre clave del partido para el Liverpool pues era el tapon para que Kaka no pudiera hacer su futbol y despreocupar a Gerrard lanzado en ataque, quiso manetener un sistema conservador pero craso error de Benitez en vez de poner a Crouch que Kuyt para este sistema de juego, en cambio Ancelotti acerto poniendo al Pippo en vez que a Gilardino son cosas que tiene el futbol
La liga del marketing y el pelotazo en 2 años se ha quedado como el perro de las 2 tortas.
Este Blog es fenomenal.
Bueno, si la suerte cuenta, le contó al Milan. Es mejor equipo y debió ganar, no hay vuelta de hoja. Fue un juego muy cerrado, chato, raspado, pero al final emocionante (de emoción, no de calidad).
Ganó el equipo al que le iba después que fueron eliminados los demás. á muy bueno, Seedorf agobiado por las marcas, pero así juega el Liverpool. El Milán juega a ganar. Inzaghi es Inzaghi, las mete. Salud Milan. Maldini eterno, supongo que ahora si se retira.
Se me hace agua la boca. En el futbol el campeon necesita suerte, y creo que el Real Madrid la ha tenido. Y ahora ademas tiene caracter, de modo que los veo ganando los tres partidos que restan. Si Ronaldinho se deja de pavadas y hace lo suyo, y los otros acompanan, el Barsa tambien ganara los tres partidos, pero no le bastara, por los enfrentamientos directos. El llanto se escuchara en toda Cataluña, pero no estará mal, porque los merengues han llorado y mucho los ultimos años.
En Francia acaba de renunciar Houllier al Lyon, y eso es lo mas interesante de la temporada futbolistica. Lo de Espana, en cambio, es apasionante. Yo espero una arremetida del Sevilla, pero creo que lo tendra dificil superar a los dos grandes.
Cierto, respeto a Houllier ¿que extraño, verdad? En cuanto a Milán...nada que no fue previsto.
Yo he apostado que Sevilla ganará la liga pero ahora es muy justo, vamos a ver – otra fin de semana con partidos claves. Si Barça ganara a Getafe fácilmente, es decir, 3-0 o 4-0, algo semejante, voy a sospechar un acuerdo: Vosotros la copa y nosotros la liga (¡!)...es mi imaginación, es porque el bar donde veo el fútbol es una cueva de culés!!
Además de suerte, también se necesita otro tipo de "ayudas".
No nos olvidemos del penal que le da el empate al Milán en el partido de ida contra el Bayern, ni de la tarjeta a Mascherano en la final que practicamente obligó a Benitez a cambiarlo.
El Milán y "il Cavallieri" siempre suelen gozar de estas ventajas, por algo comenzaron la liga con puntos negativos.